La Fundación para la Protección Social de la Organización Médica Colegial (FPSOMC) ha mostrado su compromiso con motivo del Día del síndrome de Down. Desde la organización ofrecen las ayudas y prestaciones en su programa de protección social para dar respuesta a las necesidades que pueda presentar este colectivo.
Dentro del apartado Dependencia-Discapacidad, la FPSOMC dispone de una ayuda destinada a niños con necesidad de tratamiento de atención temprana de 0 a 6 años. El objetivo es ayudar económicamente, de forma complementaria al sistema público, al socio protector en los gastos ocasionados por los tratamientos, tanto preventivos como asistenciales, para trastornos presentes durante el desarrollo, o en riesgo de padecerlos, que potencien la capacidad de desarrollo y bienestar físico o intelectual del niño.
Dr. Eduardo Martínez: «Gracias a las ayudas que ha recibido mi hija con Síndrome de Down ha alcanzado logros insospechables»
El Dr. Martínez, colegiado en Murcia, recibe, junto a su mujer, una prestación de Atención Temprana de la FPSOMC para su hija María con Síndrome de Down. El Dr. Eduardo Martínez cuenta como «hace 11 años vino al mundo María de un modo inesperado siendo portadora de la trisomía 21». Desde entonces recibió una educación esmerada inicialmente en una guardería adaptada y posteriormente en el colegio público de la provincia.
«A lo largo de estos años ha progresado mucho desde la etapa infantil hasta la educación primaria, ha alcanzado logros insospechables», señala. En ese camino resalta que siempre han contado con la ayuda de muchas personas «tanto de su centro de Atención Temprana como de los profesionales de los centros educativos en los que ha estado y por supuesto de nuestra propia familia».
En mayo 2016 el Colegio de Médicos de Murcia se puso en contacto con ellos para darles a conocer la existencia de las ayudas de la Fundación para hijos de colegiados menores de 16 años que estuvieran en tratamiento de Atención Temprana. «Desde entonces recibimos la prestación mensual. Tanto mi mujer como yo somos médicos colegiados, pero sobre todo somos los padres de una niña diferente y necesitamos una ayuda a las tareas más hermosas que nos ha tocado vivir: cuidar y educar a María», resalta el Dr. Martínez.