Entrevista en El Pueblo de Ceuta
El presidente del Colegio de Médicos de Ceuta, Enrique Roviralta, pone de manifiesto que “lo más lamentable es que siguen sin tomarse medidas eficaces y a largo plazo como la declaración de Ceuta como área de difícil desempeño y cobertura médica”
El sistema sanitario de Ceuta lleva evidenciando importantes carencias desde hace años, y estas además se han visto agravadas en estos dos últimos años desde que llegase la pandemia. Para conocer algo más de cómo se está viviendo esta situación entre los facultativos de la ciudad, y lo que ha supuesto la pandemia, EL PUEBLO ha entrevistado al presidente del Colegio Oficial de Médicos de Ceuta, Enrique Roviralta, quien ha reconocido que esta pandemia ha tenido y sigue teniendo efectos demoledores sobre los facultativos, tanto psicológicos como laborales, además de recriminar a la Administración que siga haciendo oídos sordos a las demandas de los facultativos, favoreciendo así una sangría de batas blancas que no para.
Pregunta.- ¿Ahora mismo, cómo ve la situación de la pandemia tras casi dos años combatiéndola?
En definitiva, no podemos bajar la guardia especialmente en lo que respecta a las medidas de prevención individual.
P.- ¿Podríamos estar llegando al final de esta pesadilla o todavía queda mucho por andar en esta pandemia?
R.- Es difícil asegurarlo y aunque hemos mejorado con respecto al principio de la pandemia gracias a que conocemos mejor al Covid, cómo diagnosticarlo y combatirlo; sin embargo este virus no para de darnos disgustos con la aparición de nuevas variantes y de rebrotes. Por ello, ante la incertidumbre lo mejor es la prudencia.
P.- ¿Cómo ha afectado esta pandemia a los facultativos? Y ¿cuáles han sido las quejas trasladadas?
R.- La pandemia ha tenido (y sigue teniendo) efectos demoledores sobre los facultativos, tanto psicológicos como laborales. Es frustrante comprobar que cuando parece que todo terminaba, la incidencia de infecciones volvía a subir y a sobrecargar los servicios de Urgencias y Emergencias, la Atención Primaria, la UCI, las plantas de hospitalización, en definitiva, dejando exhausto a todo el sistema sanitario.
Las quejas al principio de la pandemia fueron sobre todo por la falta de equipos de protección adecuados para el personal sanitario y en la actualidad son fundamentalmente por la falta de personal y la sobrecarga asistencial.